Susana Strausz
Córdoba, Córdoba, Argentina
Son realmente insondables los caminos de la vida. Hoy, 30 de agosto de 2020, hace exactamente cuarenta y tres años que me disponía a dejar atrás las cárceles de la dictadura, después de un año en el que fui sucesivamente “huésped” del Campo de la Ribera, El Buen Pastor y la penitenciaría, todas en Córdoba, mi ciudad. Después, en Buenos Aires fui alojada en “las lujosas” instalaciones de la cárcel de Villa Devoto, lugar que debí abandonar al poco tiempo ya que fui “invitada”, junto con una compañera mendocina, a “concurrir” a Coordinación Federal, donde supuestamente estaba mi ficha. Según parecía había dejado de interesarle al Poder Ejecutivo Nacional (PEN) por lo que me abandonaba a mi suerte. Un año alejada de mis hijitas, mi marido, mis seres queridos, en fin, la dictadura se había deglutido un año entero de mi vida dado que me habían detenido el 26 de agosto de 1976.
Ahí en Coordinación, la incertidumbre me carcomía pero había aprendido a mantenerme callada y a ocultar mis emociones por razones de seguridad. Esa prevención que aparentemente no aplicaba mi compañera -cuyo nombre nunca supe- que a través de breves diálogos me hizo saber que era maestra, que militaba en el Partido Comunista (PC) y era unos años mayor que yo. La cumpa no parecía dimensionar la situación en que estábamos y buscaba dialogar con los guardias para intentar convencerlos de lo injusta que era nuestra sociedad, incluso para ellos mismos. Creo que si hubiera tenido a mano alguna ficha, los afiliaba al partido. Nunca más supe nada de ella, seguramente seguirá dando clases y militando.
No voy a negar que me costó muchísimo adaptarme a la nueva situación. Tanto tiempo metida en esas celdas diminutas, compartiendo tan mínimo espacio con varias compañeras, hizo perder el sentido de las dimensiones. Los ómnibus urbanos me parecían enormes, cruzar una calle me generaba indecisión por no poder calcular el tiempo que me tomaría antes de que un auto me hiciera pomada. Ni hablar del dinero. Estaba totalmente alejada de los precios, incluso los de artículos de uso diario. Además habían aparecido billetes que yo desconocía. En fin, estaba más desorientada que “perro que lo ha dejado la mudanza”.
Pero había que retomar la vida. Con mi marido, que vino a buscarme a Buenos Aires, porque yo no tenía guita ni para un taxi, volvimos a Córdoba. Con enorme alegría nos reencontramos con nuestras hijas, a la sazón de nueve y siete años, que a raíz de mi detención habían quedado en La Falda para completar el año escolar con la familia de él. La mía -mamá, papá y hermana con su familia- se habían radicado en Israel. Cuando terminaron las clases, volvimos al departamento de Córdoba en el que me habían detenido y retomamos nuestra rutina. Bah, no tanto como rutina ya que quedé embarazada, algo absolutamente impensado, y en septiembre del ’78 llegó para alegrarnos la vida otra nena cuyo nombre estaba cantado: Victoria.
Tuve dificultades para retomar mis estudios, porque la Universidad de Córdoba (UNC) me exigía “certificado de buena conducta” ¡Jajaja! No lo obtuve, por supuesto, de modo que seguí estudiando en forma privada. Así, colaborando con mi marido en su profesión, hice de dibujante, recepcionista, secretaria, gestora, etc.
Sin embargo yo percibía que algo me faltaba y eso me hacía sentir incómoda. Haber compartido tantas charlas y discusiones desde distintas posturas políticas, con compañeras de diferentes ideologías, habían renovado en mí ciertas inquietudes. En casa las cuestiones políticas habían estado siempre presentes. Mientras mi marido trabajó en EPEC, la empresa cordobesa de electricidad, estuvo vinculado al Sindicato de Luz y Fuerza, fue delegado y miembro del sindicato en la resistencia después de ser intervenido. Desde el principio la figura de Agustín Tosco(1930-1975). Fue un dirigente sindical argentino del gremio de Luz y Fuerza, de ideología marxista, miembro de la Confederación General de Trabajadores (CGT) de los Argentinos y uno de los principales actores del Cordobazo (1969). fue para nosotros una guía que nos impulsaba a luchar para expulsar la dictadura y generar una sociedad más justa y democrática. De todos modos, yo personalmente no encontraba donde canalizar esas inquietudes y la vida transcurría.
Terminó al fin la dictadura. Gobierno de Alfonsín(1927-2009). Abogado, político dirigente de la Unión Cívica Radical (UCR). Primer Presidente Constitucional luego del golpe cívico militar de 1976-1983. Impulsor del Juicio a la Junta Militar., dos gobiernos de Menem, la bendita AlianzaLa Alianza para el Trabajo, la Justicia y la Educación, más conocida como La Alianza, fue una coalición política entre la Unión Cívica Radical (UCR) y la Alianza Frente País Solidario (FREPASO), conformada en 1997 en la Argentina. Ganó las elecciones de 1999 llevando a Fernando de la Rúa a la presidencia., Duhalde(1939-2012). Historiador, periodista, abogado y defensor de militantes políticos. Se exilió en 1976 y en 2003 asumió como Secretario de Derechos Humanos de la Nación hasta su fallecimieto., hasta que un día apareció Néstor Kirchner y, aunque no puedo precisarlo bien, calculo que fue entonces cuando me enteré de la existencia de un grupo de ex presos políticos que querían conformar una asociación en la que cada uno aportara sus experiencias. Era la oportunidad de reencontrarse con queridos compañeros y volver a militar. Me gustó la idea y comencé a concurrir. Esa organización fructificó en la Asociación de Ex Presos Políticos donde creamos un coro al que llamamos Contra Coro al Resto.
Debido a divergencias internas, meses después la asociación se dividió. En nuestra fracción, denominada Agrupación de Ex Presos Políticos por la Patria Grande, quedó el coro. De inmediato le asignamos el objetivo de interpretar canciones que además de un valor estético musical expresaran un mensaje pedagógico centrado en valorar la Memoria, la Verdad y la Justicia. Con nuestro coro hemos tenido suerte variada, aunque en realidad me sorprendió su penetración en distintos ámbitos culturales, ya que fuimos invitados desde otras provincias y ciudades del interior. Además, hicimos presentaciones en la UNC, en el Instituto Patria en la Capital Federal, en la Catedral de La Rioja en Homenaje a Monseñor AngelelliBeato Enrique Angel Angelelli (1923-1976). Obispo católico asesinado en La Rioja el 4 de agosto de 1976 por el terrorismo de Estado. Se caracterizó por su fuerte compromiso social. Promovió la formación de cooperativas de campesinos y la sindicalización de peones rurales, mineros y empleadas domésticas., colegios primarios y secundarios y llegamos -incluso- al escenario mayor del Folklore en la ciudad de Cosquín.
Brindamos recitales en sindicatos y en otras organizaciones sociales y concurrimos también a eventos corales en los que dejamos nuestras huellas -no siempre compartidas por los otros coros- con la convicción de nuestro aporte militante a la causa por la que tantos compañeros y compañeras lucharon y hasta dejaron sus vidas. Lo importante de nuestras presentaciones es que al aspecto coral, que lo interpretamos muy bellamente, al menos así lo veo, le sumamos el mensaje que siempre tratamos de destacar. Así intentamos exponer nuestras experiencias e intentamos que el público capitalice y reconozca la terrible injusticia y los atropellos que cometió la dictadura cívico militar eclesiástica y que valore el accionar de las organizaciones de Derechos Humanos (DDHH).
Si aceptamos la premisa de que “la Patria es el otro” o como dice un poema que recuerda mi compañero de vida ”es pa’todos la cobija o es pa’todos el invierno“, encontré en el gobierno de Néstor y Cristina, y ahora en el de Alberto, la defensa de esos valores que todos los integrantes del coro y de la Agrupación de Ex Presos Políticos por la Patria Grande compartimos, ya que nos identificamos con la causa Nacional y Popular.
Etiquetas: ARTE, DERECHOS HUMANOS